

Entrevista a Carlos Santamaría
“Me da orgullo ser la voz de este canal que le habla a todo el país”
Hay quienes lo conocen solamente por haberlo visto en cine, teatro y televisión. Pero Carlos Santamaría es, además de actor, un locutor que ha trabajado en varias publicidades y, desde la fundación de Encuentro, anuncia desde las tandas todo lo que está pasando y pasará en el canal. En esta entrevista cuenta cómo llegó al proyecto y repasa la construcción de su vínculo con la señal.
Publicado: 22.08.2022
Por: Javiera Pérez Salerno
Categoría: Entrevista
Las voces que escuchamos en los medios suelen quedarse con un lugar muy especial en nuestros universos sonoros. Se trata de voces familiares, con una identidad propia, que reconocemos de inmediato: locutores de comerciales, relatores de fútbol, conductores de radio, canciones y jingles nos quedan asociados a un tiempo y a un espacio como atados con un hilo invisible.
Aunque muchos no lo sepan, este es el caso de Carlos Santamaría, la voz detrás de Canal Encuentro. Carlos es actor con una gran carrera en series televisivas. Tuvo un fuerte protagonismo en una de las series más recordadas de los 90, Verdad/Consecuencia, pasó por otras como El puntero, El elegido o Sos mi hombre y hoy se lo puede ver en María Martha, el crimen del country. También es una cara habitual del cine nacional. Pero no todos saben que, de vez en cuando, trabaja exclusivamente con su voz.
De “panza, zapan, pancita” como decía esa publicidad de Buscapina, a “ya salió Hola Argentina”, la voz de Santamaría puede rastrearse en trabajos totalmente diferentes. Fue parte de la identidad de la recordada radio Kabul a principios de los años 2000. También de Nacional Rock. Desde hace 15 años, es la voz que nos cuenta todo lo que sucede o va a suceder en la pantalla de Canal Encuentro.
Comenzó a actuar gracias a un padrino mágico. A los 18, su cuñado era el gran Vinicius de Moraes y Carlos pasaba temporadas en Río de Janeiro donde oficiaba de chofer y seguía al cantante en sus aventuras por la ciudad con amigos como Roberto Carlos, Tom Jobim o Toquinho. Fue justamente Moraes quien le mostró el camino. “Me dijo ‘vos tenés que ser actor, yo te pago los estudios en Buenos Aires’. Entremedio de las risas –porque él era un niño, jodíamos y jugábamos mucho–, él me metió el bicho de la actuación. Yo tenía 18 años, hacía changas y no sabía muy bien para dónde arrancar. Cuando se murió mi viejo, decidí hacerlo. Y desde la primera clase sentí que era algo que había buscado toda mi vida. Nada me había causado tanto placer”.
Ya era un actor conocido cuando decidió sumar la faceta de la locución, que no es más que otra forma de interpretar. Estudió y se recibió en ETER, la escuela de comunicación de Eduardo Aliverti. “Se me conoce más como actor, pero desde hace mucho tiempo decidí, con otro amigo más, Wando Villamil, estudiar locución. Necesitábamos el título para poder trabajar diciendo marcas al aire. Estudiamos ya grandes, íbamos a la mañana, sonaba el timbre, salíamos al recreo, era raro porque yo tenía la edad de los padres de mis compañeros. En ese tiempo estaba haciendo Historias de sexo de gente común, era bastante esforzado. Pero lo hice”.
Gracias a ese título habilitante pudo aceptar la propuesta que le llegó en 2007 a través de Tristán Bauer. Estaban comenzando un nuevo proyecto y necesitaban una voz que lo unificara. Al principio le dijeron que iba a ser una suerte de canal-escuela, dedicado, sobre todo, a los oficios. “Y yo pensé que no iba a durar nada, pero acá estamos”, cuenta sonriendo, a 15 años de la fundación del canal, el mismo tiempo que lleva poniéndole la voz: nunca hubo otra.
RP
¿Cómo fue la búsqueda del tono ideal para un canal como Encuentro?
CS
Lo fuimos encontrando de a poco. Necesitábamos un tono acorde, amable, que no fuera duro en términos de locución. Y lo más importante, que se escuche bien en todo el país, algo que es clave en todo lo que hace Encuentro, donde todo tiende a la fusión, a convertirse en algo que puedas incorporar, que no sea extraño. Me gusta sentir que mis aportes sirven para esa construcción federal del canal.
RP
¿Qué pensás del canal en general? ¿Te vinculas con él como espectador?
CS
Me acuerdo de estar en Tilcara y ver en la tele la noticia de un piquete en la 9 de Julio. Pensaba: ¿qué tiene que ver esta realidad que pone Canal 13 con lo que se vive acá en Tilcara? Todavía se sigue con esa cosa de mostrar solo lo que pasa en el Obelisco. Por eso, una de las cosas que más me gusta es encender Encuentro y ver alguna cosa que tiene que ver con nuestra identidad en general. Me da orgullo ser la voz de este canal que habla de todo el país y llega a toda la Argentina. Se lo quiso achicar, pero ahora está volviendo a ser ese canal educativo basado en programas fantásticos como Escuelas argentinas, con propuestas que visibilizan a todo el país, que descentralizan el flujo de la información. Además, esos programas llegan a las escuelas como material de estudio. Y eso me parece espectacular. También me interesa que no tiene cortes publicitarios, entonces ves los programas hasta el final. Es como un antídoto contra la dispersión.
Me ha pasado la del taxista que va manejando, mirando hacia adelante, y que de repente me diga: ¿Puede ser que te conozca de algún lado? Es la voz, me suena esa voz.
RP
¿Qué te produce, cuando lo estás viendo, escucharte a vos mismo ahí? ¿Alguien te reconoció alguna vez?
CS
Cuando me veo actuando hay una cosa visual y de sonido que se complementan, pero acá hay un tema del tono de voz, todo paso por ahí, y me agarra un poco más de autocrítica. Ridícula porque ya está, ya está en el aire, llegando a la gente. Pero creo que es lo que le pasa a todo el mundo. No me reconocen pero me ha pasado la del taxista que va manejando, mirando hacia adelante, y que de repente me diga: “¿puede ser que te conozca de algún lado? Es la voz, me suena esa voz”. Y cuando les digo que quizá es por Canal Encuentro, enseguida hacen la conexión.

Carlos Santamaría: muchas veces actor, muchas otras locutor
RP
¿Cómo fue la experiencia de conducir Detrás de todo encuentro (2015)?
CS
Bueno, ese fue un momento especial porque, por primera vez desde su fundación, el canal iba a ser manejado por otro color político. Se buscó generar en esos especiales un recorrido por las bases que se habían formado durante todos esos años. Hicimos cuatro episodios que yo conduje, uno por cada área que toma el canal: Ciencia, Historia, Sociedad y Cultura. Fue interesante porque en ese momento salté del otro lado, y se unió la cara con la voz.
A mí lo que más me gusta es cuando hay textos largos, sobre Belgrano, sobre la patria, sobre la muerte de alguien. Textos en los que me pueda meter alguna emoción, por eso esta experiencia fue muy interesante. Quince años más tarde, pensar en Canal Encuentro es pensar también en su voz, que nos cuenta con calidez qué está pasando, cómo se vive y cuál es la cultura en todo el territorio nacional. Una voz que ya es parte de la mezcla sonora de nuestro tiempo.
Esta entrevista fue hecha por

Javiera Pérez Salerno
Es licenciada en Letras (UBA), guionista y editora digital. Durante varios años fue parte del área transmedia de Canal Encuentro. Escribió Randonautas (2021), una historieta dibujada por Pitucardi y «Máquina Textual» un ensayo sobre Maradona y los memes antologado en el libro Todo Diego es político (2020) de Síncopa Editora. Colabora con diferentes medios y trabaja en Caja Negra Editora.
tw: @labicivoladora
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